viernes, 4 de mayo de 2012

EL NARRADOR

Alumnos:
El segundo elemento del mundo narrado que trabajamos esta semana es el narrador. Ya hemos visto la clasificación de narrador (Página 71 de su libro de Lenguaje) y el otro tema al respecto, es la Focalización.
A continuación, les dejo la información de la focalización, con ejemplos, para complementar lo trabajado en clases.
Información extraída del  Manual de Preparación para rendir la PSU, hecho por la Universidad Católica de Chile. Pág.86.


FOCALIZACIÓN, PERSPECTIVA O PUNTO DE VISTA

La focalización, alude al grado de restricción de la información que la voz narrativa asume con respecto a las acciones de los personajes. En la narración tales acciones se presentan siempre desde un ángulo específico. De este modo, tenemos:

a) Focalización cero: Se denomina a la narración clásica de un hecho. En este caso se aprecia una ausencia total de focalización. Corresponde a este modo narrativo el narrador omnisciente, pues conoce todos los puntos de vista. En otras palabras el narrador sabe más que los personajes.

Ejemplo:
Ana Pavlovna sabía que Pedro era pariente del príncipe Basilio por linea paterna prometió ocuparse de él. (...) En esto, la anciana señora que permanecía junto a la tía se levantó y siguió al príncipe Basilio hasta la abtesala. Su rostro era dulce y dolorido expresaba ansiedad y alarma. 
(Tolstoi, león. Guerra y paz)

b) Focalización externa: la voz narrativa solo describe lo que ve y oye; no accede a la conciencia de los personajes; acentúa sólo como un testigo del acontecer. Presenta una visión del objeto y del sujeto.

Ejemplo:
"descubriré brevemente y por orden estos ríos, empezando por jarama:..."
 (Sánchez Ferlosio, Rafael. El jarama)

c) Focalización interna: el punto de vista del narrador esta situado en el interior del personaje. Podemos hablar, por consecuencia, de un narrador que podría ser protagonista o testigo. En los dos casos, la focalización es interna supone un grado de conocimiento relativo o parcial. El narrador sabe tanto como los demás personajes, solo que el protagonista no cede en ningún momento su voz: hecho que lo diferencia del testigo.

Ejemplo:
hace años que mi cara no me sorprende ni siquiera cuando me corto el pelo. Sin embargo, aquella noche, el cepilllito embadurnado de pasta negra que sostenía en mi mano derecha no llegó a encontrarse con las pestañas tiesas, inmóviles, perfectamente adiestradas, que los esperaban al borde de unos párpados bien estirados, porque un instante antes de que alcanzara su destino, me di cuenta de que mis ojos estaban brillando demasiado...       
(Grandes, Almudena. atlas de geografía Humana)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola jijijiji:)